viernes, 21 de marzo de 2014

Más historias y menos cuentos

Antagonista a su pasado
allí me encontraba yo,
acariciando su espalda,
sin soportar todavía 
ese exceso de amabilidad y sonrisa.
Es de este tipo de gente, ¿sabéis?
de esos que bailan bajo la lluvia,
cantan a deshora
y jamás incluyen el gris en su gama de colores.
El problema es
que sigo sin poder amar sus defectos
sin valorar sus virtudes,
quemándome entre sus sábanas verdes,
sin dejar de anhelar otra historia.

martes, 11 de marzo de 2014

Will you remember me in ten years?

Buscaba;
ansiar como al principio,
la añoranza de antes de ser suya.

Quería
sólo por una vez
 que lo efímero
no existiera.

domingo, 16 de febrero de 2014




No podía imaginar
cuan profundos
eran sus azules.

Me extasió
el deseo
de perderme 
en aquellos ojos
toda la noche.

domingo, 9 de febrero de 2014

Conoces a muchos genios, deberías conocer gente tonta de vez en cuando. Podrías aprender algo.

Y así era ella,
de esas de Allen y Sabina,
de sueños con Manhattan
y la calle Melancolía.

De las que se guardaban los orgasmos en el bolsillo,
te regalaban una desvergonzada sonrisa
y se iban, así, sin más

Aquel abril, 
de madrugada, para ser exactos,
se autoconvenció -que suele ser similar a mentirse-,
de que no volvería a escribir para nadie
que no fuera ella misma.

domingo, 7 de abril de 2013

Dancing Queen

No existieron luces.
Reptó hacia mí magnetizándome, 
concibiendo calidez.
Estremeció entre música y rugidos.
Ser la invitada de honor,
la reina de su fiesta.
¿Hay sensación más poderosa?

jueves, 4 de abril de 2013

Hope die last. But Hope has died.

Prometo que mañana
encontraré ese momento del día
en el que me conciencie
de dejar de vivir
en las ciudades del pasado.

Hablemos de las cosas que nunca volverán.


Un día dejaré bajo tu puerta una lista de promesas incumplidas;
dormir abrazados,
ir al teatro,
bañarnos en la playa de noche,
hacer el amor en todas las camas que nos tentaron,
el último cigarro a medias -tal vez con algún aliñe-
un viaje corto, breve e intenso,
no salir de la cama en un día entero,
fotografiar cada una de tus miradas
y mil cosas imposibles que ya no logro recordar,
mil y una cosas que algún día haré mientras me rehago,
porque no se le puede pedir que recomponga las cenizas
a una lista que ha muerto de tristeza.

Así que ahora, miro hacia el futuro. Pero siempre he sido terriblemente nostálgica y
me produce un tremendo desagrado ver en lo que te vas convirtiendo día a día,
y por ello, no te extraño ni necesito.
Pero a él sí. 
Es algo que tengo asumido en el alma y la piel.
                                                          Siempre le echaré de menos. 
Porque amaba profundamente lo que era.
Lo que eran.
Tu antiguo tú, y mi viejo ser.